A base de cirugías logró transformarse en un “dragón”

Cuando era banquero era conocido como Richard Hernández, tenía familia y una vida “normal”, pero no era feliz ni estaba a gusto con su cuerpo. Ahora, tras una serie de modificaciones corporales extremas y tatuajes ha conseguido sentirse mejor consigo mismo, pero perdió a su familia; se hace llamar “Tiamat Legion Medusa”, tiene 61 años y asegura ser el primer “dragón sin género” otros lo conocen como “el dragón humano”.
Tiamat, quien es originario de Texas, aseguró en una entrevista que siempre estuvo atraído por las perforaciones y los tatuajes: “Antes de vivir mi vida como el bicho raro que soy, ya tenía 79 piercings y la mayoría estaban ocultos… Los que no lo estaban, podía quitármelos todos los días y volverlos a poner”, comentó.

Durante la entrevista, Tiamat dijo que se había cansado de su vida “Godín”, pues quería más piercings y tatuajes, por lo que a sus 40 años, decidió comenzar su transformación.
En dos décadas se ha entintado la cara, se cortó la lengua en dos y se ha puesto implantes en la cara, que le costaron cerca de 80 mil dólares.
Su apariencia ha llamado la atención, sin embargo le trajó problemas familiares, principalmente con su hijo con quien perdió el contacto a raíz de su cambio.

“La relación o la conexión con mi hijo ha cambiado… En el momento en el que empecé mi transformación, mi hijo ya había cumplido 16 años y me rechazó”, contó.
“Mi hijo no ha estado en mi vida desde hace siete años, espero que al menos me esté viendo en Internet porque la razón por la que estoy ahí fuera de una manera tan grande es por él”, añadió, según recogió el diario estadounidense The New York Post.
Pero no todo es malo, ya que Medusa aseguró que uno de sus objetivos es demostrar que se puede ser exitoso con la vida que escogió tener, para así motivar a otros a seguir sus sueños. “Es increíble oír y ver a gente que no me conoce asumir automáticamente que soy un perdedor, que nunca he conseguido nada en mi vida o que soy un ignorante”, declaró.